domingo, 11 de enero de 2009

La cara contra el piso.



“Me han ofendido mucho y nadie dio una explicación” (Sui Generis)


Ella ha sarpado de tu puerto, y se ha marchado mar adentro. Y me insultas porque no quiere tu luz de faro. Ella se marchó hacia el horizonte, dejando un puerto, y aunque a veces vuelve a ver tu playa con cariño, pero no cambia su rumbo lejano.
Logró safar su ancla de tu ondo suelo, y no piensa volver a encallar.
Ahora buscará otro arresife para rozar su quilla, y talvés no será la primera playa que encuentre… pero ahora es libre para hacerlo. Mientras tú… te queda solo mirarla alejarse, hacia el cielo estrellado… mientras tú… te quedas con tu arena sucia y negra.
Ahora buscará otro suelo donde lanzar su ancla, donde posar y moverse lentamente de un lado a otro… donde mojarse y esperar la noche para caer en su arena.

2 comentarios:

  1. Siempre tenemos la eleccion de ser faro o barca, esta en nosotros descubrir nuevos mares y playas o quedarnos arraigados al suelo esperando que algo o alguien aparezca en nuestro horizonte.

    buen post men!

    ResponderEliminar
  2. Estoy realmente sorprendida, con que facilidad logras sacarme un lagrima!! escribes muy bonito, y me remontas a momentos que he vivido.

    ResponderEliminar

Los comentarios son alivio para el dolor...