CANSADO DE:

Creo que la frase más común en este momento en Costa Rica, es “estoy cansado”, desde que la dijo nuestro Presidente de la República hace unos días.
Esta simple frase llevó a la prensa a hablar del tema durante varios días y con la mala intensión que siempre está presente fueron rápidamente donde la oposición a preguntar que pensaban del “estoy cansado” del Presidente.
No obstante que relajante es decir “estoy cansado de”, es una frase tan simple y tan relajante como decir lo siguiente que siempre quise decir:

Estoy cansado de que las mañanas empiecen a las 5:00am, y ver el bufón de mi espejo al otro lado… cada mañana.
Estoy cansado de que el aire no huela a nada, que el agua sea simpre insípida y que tu no estés a mi lado.
Estoy tan cansado de verme yo intentando vivir cada día y que las cosas no salgan como se planean, mientras a otros parece que nacieron premiados.
Estoy cansado de ver buses sin vida que adentro gente con menos vida, y con aquellas caras tristes de lamento sobre su vida.
Estoy cansado de las guerras y de la economía mundial, que por no entenderlas, no formo parte de ellas, pero igual me afectan.
Estoy cansado de ver gente con títulos, pero sin esperanza.
Estoy cansado de ir a los mismos lugares para ver cosas diferentes.
Estoy cansado de que las salidas marchitas de los mall, se llenen de taxis y filas de compradores, que ignoran al mendigo que se encuentra ahí.
Cansado de lucir grises trajes y una corbata que se vuelve mi horca cada vez que llega el atardecer.
Cansado de llorar en las esquinas por el minuto que se ha ido y de pensar la forma de poder escuchar lo que se habla en algún lugar sin que nada me distraiga.
Cansado del vicio que vuelve amarillos mis dedos, del humo de la noche y del ruido de una ambulancia que no llega a tiempo.
Estoy realmente cansado de los matutinos que dan malas noticias y desmotivan a las personas desde las 5:00am, cuando las mañanas empiezan y estoy cansado.
Cansado de lo mismo, muerte, asalto, destrucción, robo, biombos, injusticias, desenfreno, llanto, dolor, tristeza, desesperación y condiciones.
Cansado de la madrugada que no veo porque tengo que dormir para levantarme temprano y pierdo el color naranja del amanecer enfrente del Mar Caribe.
Cansado del atardecer en la ciudad, donde el cielo llora para limpiar lo sucio de la ciudad y corramos a taparnos de las lágrimas del cielo debajo de un paraguas negro y triste.
Cansado de verte llegar, y tener que decir adiós ante la despedida, donde tu te vas conmigo y yo me voy contigo para quedarnos solos.
Y finalmente cansado de casi todo, menos de ti, cansado de decir adios y no hola, cansado de ver más funerales que nacimientos, cansado de mentir y vivir así.